Different Severities of Autism Spectrum Disorder (ASD)

El trastorno del espectro autista (TEA) es un trastorno del neurodesarrollo que afecta a diferentes áreas de habilidades necesarias para una serie de funciones. Esto da lugar a dificultades sociales y a la presencia de comportamientos restringidos y/o repetitivos.

El TEA ha sustituido a lo que antes eran cuatro trastornos distintos, cuya única diferencia era la gravedad. En su lugar, el uso de la palabra espectro reconoce que este trastorno difiere enormemente entre los individuos en cuanto a los síntomas presentes y el grado de los mismos. El TEA puede dividirse en niveles según el grado de asistencia que requiera la persona afectada debido a la gravedad de los síntomas que afectan a su funcionamiento independiente.

TEA Nivel 1: Requiere apoyo

El nivel 1 es la menos grave de las clasificaciones. Puede considerarse como un autismo leve o de alto funcionamiento. La comunicación social sin ayuda puede ser difícil, lo que dificulta el mantenimiento de las amistades.

 Las personas con autismo leve pueden experimentar:

  • Dificultad para iniciar conversaciones
  • Respuestas anormales a los estímulos sociales
  • Problemas para cambiar de actividad
  • Falta de capacidad de organización y planificación

Por ejemplo, una persona con autismo leve puede tener problemas para ver las situaciones desde la perspectiva de los demás y, por tanto, confundirse con ciertas señales sociales. 

TEA Nivel 2: Requiere un apoyo sustancial

El nivel 2 es un autismo moderado. Sus carencias sociales y sus comportamientos restrictivos y repetitivos son obvios y muy evidentes para quienes los observan. Afectan en mayor medida a sus actividades de la vida diaria que los que se encuentran en el nivel 1, requiriendo un apoyo sustancial para satisfacer ciertas áreas de necesidades. 

Las personas con autismo moderado pueden experimentar:

  • Dificultades marcadas en la comunicación verbal y no verbal
  • Las interacciones se limitan a intereses específicos 
  • Se observan comportamientos extraños y repetitivos 
  • Dificultad para afrontar el estrés o el cambio

Por ejemplo, una persona con autismo moderado puede reírse de forma inapropiada en una interacción social que normalmente provocaría una emoción de tristeza. 

TEA Nivel 3: Requiere un apoyo muy importante

El nivel 3 se considera autismo severo. Es necesario un alto nivel de apoyo para satisfacer todas las necesidades esenciales y es probable que requiera supervisión y cuidados las 24 horas del día. Las personas con este nivel de TEA tienen deficiencias que les impiden comunicarse adecuadamente o cuidar de sí mismas sin ayuda. 

Las personas con autismo severo pueden experimentar:

  • Comunicación verbal y no verbal muy deteriorada
  • Participación en conductas restrictivas y repetitivas, tanto que afecta a su capacidad para realizar las tareas necesarias
  • Dificultad o angustia intensa para afrontar el cambio

Por ejemplo, un individuo con autismo severo puede mover los dedos tanto que necesita refuerzo externo y ayuda física cuando se cepilla los dientes.

Incluso dentro de una misma categoría existe una gran variabilidad en la forma en que el TEA aparece, afecta y se siente entre los individuos. Con ayuda profesional y apoyo social, se puede elaborar un plan de tratamiento eficaz e individualizado para promover la independencia y las interacciones significativas con los demás.