Por qué su hijo tiene dificultades para la transición

Las transiciones se producen a lo largo de todo el día. Una transición puede ser de una actividad a otra, pasar del aula al patio de recreo o ir de casa a la escuela. Para algunos niños, las transiciones pueden ser extremadamente difíciles y pueden dar lugar a un aumento de la ansiedad o las frustraciones e incluso pueden dar lugar a comportamientos desafiantes o agresivos.

Comprender la dificultad de las transiciones

Hay varias razones por las que la transición puede ser difícil. Algunas de esas razones pueden ser que el niño esté cansado, hambriento, confundido o no esté preparado para abandonar una actividad. Estas transiciones difíciles también son comunes para los niños que tienen problemas de comunicación, habilidades sociales y emocionales limitadas o un retraso en el aprendizaje. La interrupción de la rutina es un factor importante en muchos comportamientos difíciles cuando se trata de la transición. Cualquier interrupción en una actividad puede crear un desequilibrio en el proceso de pensamiento del niño y puede resultar confuso, además de abrumador. 

Cada niño reacciona de forma diferente cuando se enfrenta a la transición. Una reacción a una transición difícil puede ser una cantidad abrumadora de emociones o un retraso o evitación de la transición. Es importante tener en cuenta las necesidades y capacidades de los niños y planificar en consecuencia las transiciones. Por ejemplo, cuando se hacen recados el fin de semana, puede ser importante incluir un pequeño descanso entre ellos para que el niño tenga tiempo para jugar. 

Crear transiciones suaves

Hay varias estrategias diferentes que pueden utilizarse para crear transiciones suaves para su hijo a lo largo del día.

  • Comprender el factor desencadenante que hace que el niño se altere durante la transición
  • Tenga preparados artículos o materiales para cuando pase a la siguiente actividad o lugar 
  • Utilizar música, canciones o ruidos familiares para señalar una transición
  • Utilizar señales visuales o indicaciones para mostrar la siguiente transición
  • Convierte el tiempo de transición en un juego o actividad
  • Practicar la transición (utilizar palabras y frases de transición para comunicar lo que se espera)
  • Practicar la comunicación de los sentimientos y las emociones (a tu hijo le resultará más fácil la transición si es capaz de comunicar cómo se siente)
  • Asegúrese de elogiar o dar su opinión cuando se realice una transición
  • Aplicar las consecuencias adecuadas 
  • Pide consejo al profesor o al cuidador de tu hijo sobre las técnicas de transición 

La estrategia más importante que debe recordar para ayudar a su hijo en la transición es mantener la calma, independientemente del comportamiento que muestre su hijo. Reconozca el comportamiento y los sentimientos de su hijo y recuerde las otras estrategias que puede utilizar para ayudar a implementar transiciones eficaces en las rutinas diarias.